Todos por gaston

Arboretum Lussich

Me encontraba en Punta Ballena-Maldonado con mi pareja, disfrutando de un fin de semana de paz y tranquilidad, cuándo decidimos salir a conocer el Arboretum Lussich.

 Como era un lugar totalmente desconocido por nosotros,  consultamos el gran Internet, este nos describió un bosque con más de sesenta especies de árboles, que fue creado por Antonio Lussich, para evitar los vientos que venían de la sierra y para poblarlo con pájaros, convirtiéndose en una de las reservas forestales mas grandes del mundo.
El lugar se presta para practicar deporte, esta muy bien cuidado, tiene los caminos bien marcados, son anchos y sobre todo están protegidos por los mismos árboles, o sea, el sol no puede impedir disfrutar de ese lugar.
Algo destacable es el aire fresco y el delicioso aroma que se respira en esos caminos, es un lugar muy disfrutable, aunque no recomiendo ir lamiendo los árboles que vas observando, ese paseo se disfruta con los cinco sentidos.

No lo recorrí en su totalidad, primero por un tema de tiempo y segundo porque de casualidad nos topamos con una carrera, organizada por  6º B del Colegio Santander, todo gracias a madres y padres de esos niños, los cuales salieron a recolectar mas de 30 premios para los primeros de cada categoría, nos hallábamos en una fiesta, la cual fue tan hermosa como el lugar.
Si la vagancia se hubiera apoderado de nosotros, nos hubiéramos perdido ese gran momento, de ver gente que apuesta por el deporte, que respeta el ambiente, que pone energía en algo para que salga adelante y bien.
Punta Ballena es un hermoso lugar, y la gente es muy respetuosa, amable y sobre todo LIMPIA.
Algo que llamó mucho la atención, es que en una cuadra había dos o más inmobiliarias, es un poco exagerado mi comentario, lo admito, pero hay muchas, como también hay muchas construcciones de complejos habitacionales, y eso demuestra que es un lugar que viene en un proceso de crecimiento turístico. Por tal motivo si están pensando en unas vacaciones para descansar, punta ballena es un gran destino, pero no se por cuanto tiempo más.

Pequeños-grandes momentos

Hay momentos que te alegran el día, momentos que captamos con alguno de nuestros sentidos, puede ser cualquiera, pero lo que es igual es la sensación que te provoca, esa alegría que te inunda en todo tu ser.
Me paso, este viernes saliendo del trabajo, como estamos entrando en la primavera, el sol abarca más horas del día, salí de ahí con un cielo celeste, lleno de nubes, y en esa misma esquina me encuentro con esta imagen, la cual la tengo porque al seguir caminando pensé: yo quiero esa imagen.
Mi celular no capturo ni cerca lo que yo percibí, pero igual la comparto, porque no es la imagen en si de lo que vine a escribir, sino de esa hermosa sensación que te llena de vida, alegría y te da ímpetu de seguir viviendo, porque no todo esta perdido, solo hay que aprovechar esas cosas hermosas que tu día te presenta, que te hace ver que el trabajo no es todo, que hay pequeñas cosas que te pueden hacer olvidar de un mal día.
Después de ver esa imagen, fui todo el camino mirando hacia el cielo, buscando más, y encontré, solo que no saque fotos, simplemente lo disfrute, porque a veces en la vida hay que simplemente disfrutar.
Por eso disfrute de imágenes que me hubiera perdido de no ser por la primera, ver como se iba la nube negra por atrás de unos edificios, vero otras muy blancas flotando en ese cielo celeste y como mejoraban un poco la apariencia de los edificios y más.
Vivo a pocas cuadras así que esa sensación me duró unos veinte minutos, son pocos, pero sirvieron para darme energías y terminar de preparar una rica cena.
En mi caso me sirvió no dejar pasar ese momento, espero que vos hagas lo mismo la próxima vez que te pase y que puedas comprobar por vos mismo lo que escribí.

[1] Día estresante

Por lo general el trabajo se termina convirtiendo en una rutina, ya que cada actividad que vas aprendiendo se va metiendo en ese ciclo rutinario, el cual una vez que se formo es muy difícil sacarla de ahí, porque gracias a esa rutina el trabajo sale, casi solo.

Obviamente hay distintos tipos de trabajos, los cuales no llegan a ser una rutina, porque cada día o cada cliente es un mundo aparte.

Yo he trabajado con público, de vendedor, cadete, cortador de entradas en espectáculos, con producción (ingresar una cantidad de archivos en un tiempo determinado), y administrativo. No soy muy bueno para los trabajos manuales, tampoco tuve la oportunidad de aprender, pero bueno, acá uno consigue el trabajo que puede.

En casi todos cree alguna rutina, tal vez no en todas las tareas, pero por lo menos en una si, y termina convirtiéndose en tu zona de confort esa rutina, zona de la cual uno no quiere salir, y a veces el subconsciente se pone en complot con la rutina, y ahí es cuando no podes salir nunca más, a no ser que venga alguien que lo pueda derribar a tu subconsciente con una llave de Aikido y así vos podes pelear contra la rutina.

Para muchos la rutina es una desgracia, se lo pasan diciendo, pero no hacen nada por salir de ella, y no se dan cuenta de ello. Yo tengo mis momentos, soy una persona muy vaga y eso me juega en contra a la hora de moverme para hacer cosas, siempre encuentro alguna excusa y para cuando quiero acordarme se me fue el tiempo.

En el trabajo de ingresar expedientes a la base de datos, me gustaba que fuera rutinario, tenia calculado cuanto tiempo necesitaba para terminar mi cuota diaria, sabía que momentos eran los mejores para ingresar lo mas rápido posible y así terminar con tiempo de sobra, algunos compañeros se reían de como volaban mis dedos, es que cuando ellos conversaban y se dispersaban yo ingresaba como un desquiciado, y después se daba vuelta la tortilla, yo tomaba mate muy tranquilo y pasando expedientes a una velocidad de uno por hora, mientras que a ellos le volaban los dedos, mas rápido que a mi, y era porque ellos tenían la presión del tiempo, esa misma presión que yo evitaba.

Para mi el mejor de los trabajos era uno que en la mañana atendía al publico y hacia tareas administrativas, pero en la tarde salía a hacer tramites, no lo disfrutaba al máximo, porque trabajaba en dos lados, y habían días que tenia que correr de un lado para el otro para poder hacer todas las vueltas, y así llegar a tiempo al otro empleo. Pero los días que no tenía esa presión los disfrutaba al máximo. Ese empleo era lindo, no por lo que me pagaban, sino por la variedad de tareas que había, la variedad de escapes, de oportunidades para cambiar esa rutina aburrida.

Hay otros trabajos o tareas que a veces te hacen desear volver a tener una rutina, el tener que completar un horario de trabajo y no tener casi nada para hacer, es lo peor, ocho horas sentado esperando que alguien entre y te traiga algo, y eso te puede pasar por varios días, pero tanta tranquilidad es un mal augurio, porque cuando llega la tormenta, llega con tutti, llega a full y te acribilla con una pila enorme de trabajo, trabajo que te agobia por tenerlo sobre tu escritorio, y lo peor es que hay cosas en esa pila que son para ayer, o sea, tenés que ponerte a laburar ya.

Esos mismos días florecen miles de expedientes en tu escritorio, aparecen los problemas que hay que solucionar en el momento, imagínate en un banco, tenés una pila de tramites para revisar y autorizar, de los cuales dos o tres son urgentes, sabes que lo podes manejar, sabes que los podes sacar en el día, pero se te aparecen entre cuatro y ciento cincuenta clientes del banco con problemas existenciales, que perdieron la tarjeta, que tienen que renovar un préstamo porque sino no tienen que comer el resto del mes, que les falta dinero en la cuenta, los que te reclaman porque les cobran intereses al usar la tarjeta en otro país, etc., etc., etc., un día insoportable, un día lleno de tensión, de preocupación, es ese día que no pudiste tomar ese café de todas las tardes porque entre cliente y cliente intentabas, sin éxito, solucionar esos tramites que tenias urgentes en la pila de tu escritorio. Esos días son muy, pero muy estresantes y sobretodo agotadores, (un síntoma de esta época, es que, en un día así, llegas al final de la jornada con batería en el celular),  pero hay una sensación, esa sensación cuando llega la calma, cuando ya no entran clientes al banco, cuando la mayoría de tus compañeros se fueron, empezas a sentir paz en el ambiente, sin tanto ruido, sin teléfonos sonando, sin gente murmurando, ese en ese momento que se te afloja el cuerpo, y ahí te sentís mejor, esa misma sensación la comparo con esos días de gimnasio que dejas todo ahí, esos días de entrenamiento que terminas verdaderamente fulminado, que liberaste miles de tensiones, que te salieron miles de muecas por el peso que estabas levantando, pero cuando terminas te sentís mejor, y a medida que vas recuperando la respiración y van reaccionando tus músculos, pensas, que valió la pena tanto esfuerzo y queres más. Para aquellos que no conocen esa sensacion les tengo otro gran ejemplo, es llegar al día más querido de la semana: el hermoso y más deseado por todos, hablo del sensual viernes.
Muchas veces ese estrés hace que uno se sienta mal con su trabajo, solo hay que intentar buscar la parte positiva a todo eso.

Yo estoy en un proceso de cambio, espero poder seguir así, y pelear por hacer lo que me gusta y sobre todo hacerlo con una meta a futuro, ya que esa meta te puede ayudar a que no te importe la maldita rutina.

El Mate

Para mi es un compañero de todos los días, es parte de la canasta básica de mi hogar, por lo general a donde voy el me acompaña.

Sus efectos son similares al café, pero lo que más tienen en común es que a cada persona le da distintos efectos al tomarlo o no, por ejemplo para muchas personas el mate de la mañana es sagrado, si por alguna razón no lo consumen les empieza a doler la cabeza, y la razón es no haber tomado mate. Otro ejemplo, que es el que más se asemeja al café, es que muchas personas necesitan tomarse unos mates para rendir a lo largo del día.

El ver la variedad de materiales, colores, tamaños y modelos, me convence cada vez mas a que el mate es para todo tipo de persona, eso sin contar  la variedad de bombillas, materas y yerbas que hay en el mercado, por ende, es difícil que dos personas tengan el mismo mate, termina siendo una marca personal, similar no es igual.

Algo que es muy Uruguayo es andar con el termo abajo del brazo, para así tomar mate en todos lados, y gracias al termo podes saber parte de la vida de esa persona, y eso es gracias a los pegotines, desde el estilo de música hasta de que partido político es partidario, es como leer parte de la historia de tu vida en imágenes.

Parte de lo antes mencionado, es lo que se llama un mate, si, si, es muy gracioso que llamemos en singular algo que tiene por lo menos seis componentes, y que todos son importantes, pero ta, así somos, tengan compasión.

Algo que no hable pero hay que tener en cuenta es que acá tomamos el mate con agua caliente, de lo contrario tomariamos tereré.

Para el que no sepa como se prepara, te dejo una pequeña guía de como armar un mate amargo, que ojo, no es la única forma de armarlo, cada uno lo prepara a su manera.

Empecemos:

•   Calentar el agua: este punto se realiza mientras hacemos el resto de la preparación, ya que va a demorar dependiendo que tan caliente quieras el agua, en mi caso, espero que el agua este a punto de hervir, o sea, caliente pero no como para pelar chanchos.

• Colocarle la yerba al mate: la cantidad a colocar depende del tamaño del mismo, pero una regla muy utilizada es colocar yerba hasta la mitad del mate, para después inclinarlo un poco, este paso va a ir perdiendo la dificultad a medida que vallamos armando varios mates.

 

•  Verter un poco de agua fría y caliente a la yerba: la cantidad es poca, pero hay que hacerlo con cuidado, porque debemos respetar la montañita que se formo cuando inclinamos un poco el mate en el ítem anterior.

• Enterrar la bombilla: esto se debe hacer donde esta la yerba mojada, y enterrarla en ella, algunos lo hacen con la bombilla inclinada y otros con la bombilla derecha. 

• Acomodar la montañita: debemos asegurarnos que nuestra montaña perdure lo máximo posible entre cebada y cebada, o dada vuelta del mate, es tanto por un tema estético como táctico.
• Cebar el primer mate: en realidad todos los mates los vamos a cebar tirando el agua contra el lado de la bombilla, lo que hay que aclarar es que le primero suele estar frió.
• Dar vuelta el mate: esta frase tan utilizada entre nosotros, no hace referencia a volcar el mate hacia abajo, esta frase se utiliza cuando con ayuda de la bombilla arrastramos parte de la montañita (hasta el fondo del mate) hacia el lado que estábamos volcando el agua, esto por lo general se hace para no tomar el mate "lavado", que es cuando ya no tiene gusto y a la vista deja de tener yerba flotando con espumita, pasa a ser un lago sucio con algún tallito flotando, cuando lo veas te vas a dar cuenta de lo que te digo, y no te ofendas si te dicen: como esta ese lago de patos.

Espero no estarme olvidando de nada con respecto al armado del mate, si nunca lo probaste, hacelo, es muy amargo, no tanto como tomar el fernet solo, pero es amargo.

Si sos de tomar mate y quieres dar tu opinión, es bienvenida, la idea es que esta guía sea lo más completa posible.

Cuidemos el Agua

El agua dulce es un recurso necesario, pero  hay mucha gente que no pueden acceder a ella, son millones de personas las que no tienen acceso, miles de niños que ni siquiera tienen la oportunidad de tomar la cantidad mínima de agua que el cuerpo humano necesita para sobrevivir. En algunos países tienen la suerte de disponer del agua embotellada, en otros como es el caso de Uruguay, la pueden conseguir tanto la embotellada, como también, abriendo una simple canilla, es un privilegio que tenemos en nuestro país, privilegio que deberíamos respetar y valorar como si fuese un tesoro.

Lamentablemente el agua dulce no es infinita, y las reservas se van agotando día a día, por tal motivo hay que tomar conciencia de lo importante que es este recuso.

Todos se pelean por el petróleo, yo quisiera ver que van a hacer con ese petróleo cuando no le quede agua a este planeta, cuando tengamos que pelear por un vaso de agua, ¿vamos a seguir peleando? o recién ahí vamos a empezar a ver que soluciones se pueden tomar.

Hay gente que no les importa que suceda dentro de cincuenta años, ya que no van a estar acá, para ver que pasa, y hasta lo dice gente que tiene familia, no piensan ni en sus hijos, y menos en sus nietos. Y hay que pensar en ellos, porque no estamos tan lejos de ese problema, por suerte hay organizaciones que esta intentando encontrar soluciones para este problema, hay otras que hacen que el agua potable llegue en donde escasea, pero no seria mejor que TODOS hiciéramos lo necesario para mejorar esta situación.

Hay gente que no le importa dejar la canilla abierta mientras enjabona el auto, o mientras enjabonan los utensilios de cocina o cuando se lavan los dientes, que necesidad tienen de dejar la canilla abierta mientras se los están cepillando, ninguna, pero muchos lo hace y así desperdician litros y litros de agua potable. Hay gente que dice: "por un día o por un rato no pasa nada, ¿que tanto daño puedo hacer?" y me encantaría que alguien le haga razonar esto: ¿cuantos años tenés? eso multiplícalo por la cantidad de veces que te lavas los dientes, el resultado multiplícalo por 365 (que son los días del año), y a ese número volve a multiplicarlo por 20 (este ultimo es la cantidad de litros que se desperdicia cada vez que no cerras la canilla al lavarse los dientes), ¿Que te parece ese número?, ahí tenés toda el agua que gastas sin sentido por lavarte los dientes con la canilla abierta.

El ver un caño roto en la calle me enfurece, me parece horrible ver como se forma ese río artificial sobre el asfalto, siempre y cuando la calle esté levemente inclinada, porque de lo contrario se forma un gran lago. Y me enfurece porque para mí, ese lago no esta lleno de agua, sino que esta lleno de injusticia.

 Espero que en un futuro todos tomemos conciencia de lo que esta pasando y todos empecemos a cuidarla, y a valorarla, y así vamos a poder seguir disfrutando del vendito H2O.

Me presento

Hola, soy Gonzalo de León,  nací el 24 de noviembre de 1985 en  Montevideo-Uruguay.
Hace muchos años yo tenía inquietudes con respecto a varias cosas, soy el clásico que quiere hacer de todo y termina por no hacer nada, un desastre.
Pero el año 2014 tomé una decisión, empezar fotografía, y fue de lo mejor que pude haber hecho, el esfuerzo de pagar una cámara y algún accesorio valió la pena. Es algo que me encanta y por eso sigo estudiando.
Ahora les cuento mis 2 inquietudes que en este 2015 las estoy retomando. La primera es escribir un blog, estoy muy contento por poder escribir cosas, es desestresante. Y la segunda inquietud es hacer teatro, en el liceo existía Teatro en el Aula, iban profesores a darnos clases y presentábamos obras, era mi sueño, lamentablemente el destino me hizo olvidarme del tema, pero este año averigüé y no lo dude, me metí a estudiar teatro.
La fotografía me ayudo mucho con todo esto, es la que me hace ser mas creativo, la que me inspira a crecer, por eso estoy acá, probando mi escritura, tratando de aprender a escribir y sobre todo tratando de mostrar de a poco mis humildes trabajos.
Gracias por leer estas pocas palabras. Chau.